ay, ay, ay. anoche. complicaciones, alcohol, descontrol, miradas, historias, risas, rincones, abrazos, escondidas, peleas, llantos, besos, no besos, te busco, buscame, si, no, si, no. NO. que noche complicada, y yo me pregunto, por qué a mi? yo soy la única yeta a la que le pasan cosas así.
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Descubrí que tengo más integridad de la que pensé y que soy más conservadora de lo que parece y también que soy una pelotuda que deja pasar oportunidades. De dónde mierda salió ésta romántica pelotuda y que pasó con la horny bitch a la que le chupaban un huevo el cómo y cuándo y dónde. Cada vez más retorcida me volví, y para peor. Anoche era la noche, su noche. Yo para él, y él para mí. Y juro que si no era por mi falta de huevos y sentido renovado del romanticismo, anoche todo salía como planeado y terminaba como ya me lo imaginé tantas veces. Mi actitud fortaleció la amistad pero hundió todo lo demás a la par del Titanic, y ahora sí que de verdad estoy en el horno.
A pesar de todo, aunque no sean las condiciones ideales y nuestra relación no sea equilibrada y estemos lejos de estar bien, te quiero.