Bueno, a ver. Por dónde empezar? El viernes pasaron muchas cosas.
Se me solucionó un problema enorme, pero al mismo tiempo se agravó todo. Debería decirle o no? Juro que no sé. Quiero con toda mi alma que pase eso que estuve esperando tanto tiempo, pero tengo tanto miedo que no me animo.
Casi se lo digo ese día, que lo vi tan mal que creo que se me rompió un poco más el corazón. Verlo tan triste, tan suceptible me llevó al punto de decirle 'no sos el único que ama a alguien y está sufriendo'. No lo dije, porque no era el momento. O porque no me animé. Cual sea la razón, me quedé callada.
La próxima vez no me callo. La próxima vez le digo todo. Lo tengo más que decidido y espero que el miedo no me traicione porque necesito sacármelo del pecho. Vuelve el 9 y yo me voy el 14. Entre esos días, me voy a animar, y voy a desembolsar todo lo que me vengo guardando hace tanto. A ver que pasa.
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Otro dato de color: cuando lo vi, a la noche, le dije 'el 14 me voy y no vuelvo', y me contestó; 'sí volvés, tenés que volver. tenés que volver para salir conmigo.'
aaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaj. te amo.
1 comentario:
Mucha merde! :) Y que este año sea tan bueno como te lo propongas! Un beso.
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